sábado, 18 de junio de 2011
¿Es posible o eficaz la resocialización de ciertos delincuente?
miércoles, 11 de mayo de 2011
Taringa como amenaza a la comunidad y al legítimo derecho a copia privada
domingo, 20 de marzo de 2011
Salud, deporte y tecnología
Por lo demás: desde hace mucho tiempo sabemos que los medios, herramientas e instrumentos son sólo eso, y, por ello, que última instancia es la voluntad y la capacidad racional de quien los emplea quien los vuelve perjudiciales o provechosos. Asimismo, sabemos que no son precisamente los ordenadores o las consolas las que inauguraron esta costumbre humana de tumbarse y permanecer casi inmóvil en una poltrona durante muchas horas. En efecto: teniendo en cuenta lo que habitualmente estos estudios o investigaciones consideran nuevas tecnologías, la televisión no puede venir a caracterizarse como una de ellas, y, sin embargo, desde hace décadas retiene a las personas en sus sofás o sillones. De igual suerte, con todo lo provechoso que pueda resultar para el intelecto, como actividad igualmente sedentaria, pasarse muchas horas leyendo; no deja, sin embargo, de resultar perjudicial en lo que respecta a esta brecha negativa entre la ingesta y el gasto calórico que caracteriza a nuestros tiempos.
En igual sentido, y para desmitificar un poco este funesto rol de Némesis de la salud que habitualmente se le achaca a las nuevas tecnologías; conviene, además, reseñar que -aunque poco promocionados entre los consumidores promedio- existen en el mercado una multitud de programas, comunidades, dispositivos tecnológicos y artículos electrónicos encaminados no sólo a promover y controlar la salud, organizar y estudiar la propia actividad física y mejorar la práctica de deportes; sino, también a detectar y evitar problemas de salud durante y después del ejercicio. Problemas de salud que, de otra suerte, muchas veces pasarían inadvertidos porque se presentan sólo bajo determinadas circunstancias, como por ejemplo el esfuerzo físico.
En este sentido, mortifica un poco confesarlo, pero no ha sido solamente la promesa de salud y el placer de hacer ejercicio lo único que me ha devuelto desde hace unos meses al running o a los circuitos de MTB; sino, ciertamente, también el enorme atractivo que ejerce en mi psicología la capacidad de censar y saber a ciencia cierta qué es lo que he hecho mientras corría a pata suelta o pedaleaba como loco. Desde luego que, puestos a hacer ejercicio, lo importante sigue siendo el puro mover las manos y/o las piernas. Sin embargo, resulta tremendamente adictivo terminar de correr o de montar en bicicleta, llegar a tu domicilio y descargar todos los datos no sólo para solazarte con lo mucho bueno que has hecho por tu salud y estado físico, sino para competir contigo mismo o tu virtual partner y compartir con tus amigos y conocidos nuevas rutas, paisajes, encuentros y performances deportivas.
Mención aparte, en este aspecto, merece la incorporación de la tecnología de posicionamiento global a los deportes y las actividades físicas. Introducción de esta tecnología por medio de relojes, zapatillas y otros dispositivos que ha favorecido la proliferación de excelentes programas como SportTracks y comunidades en línea como Motion based (hoy Garmin Connect), Wikiloc o Gpsies. Herramientas con un grado de complejidad asombroso que te permiten no sólo planificar y compartir rutas, armar la inteligencia logística de un paseo, precisar la dificultad de un track, incorporar planes de entrenamiento y tener un registro completo de tus carreras a pie o salidas en bicicleta; sino tambien rastrear tus progresos físicos, ponerte metas y verte en la necesidad de cumplirlas, estimar el tiempo de duración de los materiales utilizados durante la práctica deportiva, registrar la ruta que has hecho y verla en Google Earth o o realizar un minucioso seguimiento de tu actividad física y los factores medioambientales en las cuales se desarrolla.